Palermo es la capital de Sicilia, una ciudad que cuenta con muy mala reputación por ser ruidosa, sucia y tener un tráfico caótico. Estas son algunas de sus calificaciones, pero más allá de eso podemos disfrutar de un viaje muy interesante. Es una ciudad que cuenta con un encanto al más puro estilo del sur de Italia, se sale totalmente de lo convencional y no se parece a ninguna otra ciudad.
Por este lugar han pasado árabes, fenicios, griegos, normandos, romanos y españoles. Todos estos fueron influyendo y transformando la gastronomía de la Palermo de hoy en día, una gastronomía que forma parte muy importante del día a día de sus habitantes y que podemos disfrutar en puestos o comercios con mucha personalidad.
Esta es una ciudad perfecta donde pasar unos días o simplemente quedarnos y visitar sus alrededores. Palermo es una ciudad con mucho encanto y sin que te des cuenta te dejaras llevar por sus increíbles palacios, mercados, catedrales, iglesias, tiendas y bares. Así que, si has llegado hasta aquí, te contamos qué cosas no puedes dejar de ver y hacer en Palermo.
Recorridos a pie por Palermo
Podemos recorrer a pie el casco antiguo de Palermo, el recorrido comienza pasando por la popular Porta Nova, que se encuentra muy cerca del Palacio Real o de los Normandos, continuando nos encontraremos en dirección Quattro Cantti y el Teatro Massimo con sus dos avenidas principales: Vía Vittorio Emanuele y Via Maqueda.
La Capilla Palatina
La capilla Palatina es para Palermo lo que la Capilla Sixtina es para roma. Esta capilla se encuentra guardada como un verdadero tesoro en el interior del palacio real, está totalmente recomendada su visita no te dejará indiferente ya que es un lugar impresionante. En sus techos y paredes nos encontramos con una mezcla de arte islámico, binzantino y románico.
Escenas en las que están representadas el antiguo y nuevo testamento, destacando sobre todo su majestuoso cristo Pantocrátor, con sus impresionantes colores y detalles finamente ejecutados. Otro de los detalles igualmente de importante es el candelabro de mármol colocado sobre el púlpito. Un lugar donde no podemos prescindir del audioguía para no perdernos detalle de las maravillas que estamos contemplando. Siempre se ha comparado La Capilla Palatina con la Catedral de Monreale, pero la primera es mucho más modesta, así que se recomienda ver primero la Catedral de Monreale y después la Capilla Palatina en Palermo. De esta forma quedarás totalmente impresionado con Monreale.
La Catedral de Palermo
La Catedral de Palermo es uno de los sitios que no puedes dejar de ver, no solo por lo preciosa que es, sino por la historia tan interesante que guarda, se fundó como basílica paleocristiana, luego fue mezquita y por último volvió a ser iglesia. Toda esta mezcla cultural dio forma a su arquitectura, donde vemos elementos árabes y góticos barrocos.
La entrada es gratis, pero si quieres ver lo mejor hay que pagar un ticket de unos 7€, con este pequeño pago tendrás acceso a las tumbas, al tesoro, las criptas y el techo. Pero si vas con poco tiempo y quieres hacer un tour rápido por la ciudad, también puedes contar con un guía local, solo tienes que apuntarte en un free tour, es totalmente gratis pero recuerda dejar propina, te lo agradecerán mucho.
Los mercados de Palermo
Ya sabes lo que dicen los viajeros más entendidos, si quieres conocer un país visita sus mercados. Llenos de vida, coloridos y únicos, así son los mercados de Palermo. Aquí podrás ver el lado más local de la ciudad, Se recomienda visitarlos por la mañana ya que hasta medio día son un hervidero de gente yendo y viniendo.
Los más importantes son: el Mercato Capo, el Mercato di Ballaró, el Mercato Vucciria este cuenta con bares y restaurantes con mucho ambiente cuando llega la noche y el mercado Borgo Vecchio. Uno de los más bonitos y recomendados es el mercado de Ballaró.
Playas de Palermo
Cerca de Palermo existe la playa de Mondello en Sicilia, una de las más bonitas de Europa, puedes llegar fácilmente en bus (806) en menos de una hora.
El Palacio de los Normandos
El Palacio Real de Palermo o también conocido como Palacio de los Normandos. Fue diseñado para ser una fortaleza pero se convirtió en palacio a principios del siglo XII, hoy en día acoge la sede del Parlamento siciliano. Podemos acceder a este recinto por Piazza Independenza un lugar que se encuentra limpio y ordenado algo que la distingue mucho del resto de la ciudad.
Cuenta con horario de apertura al público de 08:15 a 17:40 horas de lunes a sábado, el precio de la entrada es de 10€, lo que te da acceso a ver la Capilla Palatina, la sala del Duque de Montalto y los Jardines Reales, y si además te pica la curiosidad y te apetece sumar a la visita los Apartamentos Reales el precio de la entrada sube a 12€, precio que realmente vale la pena pagar por ver estas maravillas.
La taquilla para comprar las entradas se encuentra próxima a la Piazza Independencia. También podemos encontrar el monumento barroco Teatro Marmoreo, construido para conmemorar las posesiones de Felipe IV de España por todo el mudo, estatua que ha sido sustituida por la de Felipe V.
Los Quattro Canti
Aquí nos encontramos con el cruce de caminos más conocido y precioso de toda la ciudad. Un lugar que no puedes dejar de visitar, si quieres presumir de haber estado en Palermo. Una intersección entre dos vías, la Vía Maqueda y Corso Vittorio Emanuele, son unas de las vías más importantes, donde el verdadero encanto lo encontramos en las 4 fachadas que las rodean. Cada una de ellas tiene una fuente en su nivel inferior. Fuentes que representan las cuatro estaciones del año. Sobre cada una de ellas encontramos representados a los 4 virreyes de Sicilia y coronando las estructuras podemos ver a los 4 patrones de la ciudad: Albergheria, Amalfitania, Kalsa y Sincaldi.
La Piazza Pretoria
Es una de las plazas más conocidas en Palermo, se encuentra muy cerca de Quattro Canti. Esta magnífica plaza se encuentra en medio de importantes edificios, dispone de unas escalinatas que te conducirán directamente a la cima de la fuente renacentista que está totalmente rodeada por sus peculiares estatuas. A los lados podemos encontrarnos con el Palazzo Bonocore, el Palazzo del Aquile que es la sede del Ayuntamiento, la iglesia de San Giuseppe dei Teatini y Santa Caterina, estos son los edificios que se encuentran rodeando a esta increíble plaza.
Pero lo que más destaca de toda la plaza es su maravillosa fuente llamada Fontana del Vergogne y sus numerosas estatuas en las que nos encontramos representados Dioses y Ninfas, que se encuentran totalmente o parcialmente desnudas. En la antigüedad la sociedad de Palermo era demasiado pudorosa por lo que la llamaron (Fuente de la Vergüenza).
Teatro Massimo Vittorio Emanuele II
Este teatro de fachada imponente es de estilo neoclásico, está dedicado al primer rey de Italia, también es el mayor teatro lírico de Italia y la meca para los amantes del cine. Ya que aquí se rodó la escena final de el Padrino III, una de las obras maestras del cine contemporáneo. En este lugar podemos recrear esa escena tan famosa de la película.
En la entrada nos encontramos con dos leones de bronce situados a cada lado de la entrada principal, que parecen darte la bienvenida, sus escaleras que te llevan ante esas 6 grandes y majestuosas columnas de estilo corintio. Este edificio está coronado por una increíble cúpula semiesférica de gran tamaño. Pero si queremos apreciar realmente esta verdadera obra de arte lo mejor es reservar una visita guiada por su interior, su precio es de unos 8€, de lo contrario tendrás que admirar solo por fuera.
Las Catacombe dei Cappuccini
Estas catatumbas son famosas en todo el mundo y se consideran patrimonio nacional. Sin embargo no es para todo el mundo ya que allí descansan cientos de cuerpos momificados, en mayor o menor estado de conservación, se encuentran totalmente expuestos. También hay niños por lo que muchos lo consideran uno de los sitios a visitar de Palermo más macabro y morboso.
Así que si te atreves y no eres de estómago sensible, aunque ante la dudas es mejor no entrar. Estas catatumbas del siglo XVII fueron usadas para el descanso de los monjes capuchinos. Pero el descubrimiento de los cuerpos allí momificados que se encontraban en muy buen estado de conservación, atrajo fama al convento, por lo que los frailes en 1783 también empezaron a acoger a todo aquel que pudiera pagar el alto costo de momificación, que habían descubierto los monjes. Así fue por lo que se crearon nuevos corredores ampliando las Catatumbas Capuchinas de Palermo.
La conservación de los cuerpos se conseguía dejándolos en la cueva, ya que contaba con un ambiente muy seco, los dejaban ahí durante ocho meses, para que el cuerpo “sude” toda la humedad, posteriormente se les hacía un baño de vinagre para que matar toda bacteria y por último se les exponía al sol hasta que la piel se acartonaba. Este secado último hacía que se encogiera toda la piel dándoles esos gestos y muecas grotescas. Entre sus momias más destacables encontramos a la niña Rosalia Lombardo, una momia tan bien conservada que se ha ganado el sobrenombre de la Bella Durmiente. La entrada cuesta unos 3€ por persona y no se permiten hacer fotos en su interior.
Monreale
Este municipio de Palermo se encuentra a 9 km y se puede llegar a él fácilmente en transporte público, puedes tomar el bus 389 que parte desde la plaza Piazza Independenza. Esta visita es imprescindible para que puedas decir que has estado en Palermo y solo te llevará medio día. Allí encontrarás uno de los edificios normandos más importantes del mundo, La Catedral de Monreale, en su interior puedes ver unos increíbles mosaicos bizantinos donde se representan escenas del Viejo y Nuevo Testamento. Otros de los sitios recomendados para visitar es el claustro que se accede desde fuera de la catedral (este es de pago).
Qué comida probar en Palermo
Este país destaca en todo el mundo por su gastronomía sencilla pero realmente exquisita. Aquí destacamos algunos de los platos más típicos, pero no por ello dejes de probar todo lo que se te ponga por delante, te sorprenderán estos sabores que parecen explotar en la boca.
Algo que no puedes dejar de probar en Palermo son las arancini, esta croqueta redonda está hecha de pasta de arroz y relleno variados, es una de las especialidades de la cocina siciliana. Este plato típico está hecho con rissoto al que añaden azafrán y rellenan de varios ingredientes, pero el favorito sin duda es el que está hecho con ragú de carne y queso.
Esta croqueta se empana y luego se fríe consiguiendo una textura muy crujiente por fuera y cremosa por dentro, vamos un verdadero manjar de dioses.
Pero si te gusta la comida más contundente no te pierdas la pasta «alla norma», que se elabora con pasta corta de cualquier forma, esta pasta se elabora de forma artesanal, una vez cocida se le añade un salteado hecho con berenjenas, tomates, queso y unas hojitas de albahaca, pese a la sencillez de este plato es una verdadera delicia.
Conclusión
Así que ya sabes proponte descubrir Palermo una ciudad realmente viva donde las haya, no te pierdas su fantástica gastronomía y su increíble cultura que guarda un montón de secretos, que no te dejarán indiferente.
